Yes, We Can,…#2 Gilia

Gilia es la segunda de nuestro grupo de enfermeras y matronas que llega a Alemania. Ya no quería esperar en Italia hasta que el mundo entero volviera a la normalidad. Después de 7 semanas de cuarentena, viviendo en casa con toda su familia, el deseo de experimentar algo nuevo triunfó y reservó un vuelo desde Milán con escala en Frankfurt hasta Hamburgo. Y así, el 25.04. se fue, en un momento en el que no era fácil salir del país sin una buena razón, especialmente para mudarse al extranjero. Pero gracias al contrato de trabajo, no hubo ningún problema. A su llegada, nuestro equipo le dio la bienvenida. Como madrona, oficialmente ni siquiera tuvo que pasar por la cuarentena. Sin embargo, el hospital prefirió hacerle una prueba del Covid-19 a su llegada a Alemania y la hizo esperar dos semanas antes de que pudiera empezar a trabajar.

Desde el 11.5. Gilia ha estado trabajando como matrona en la clínica Gesundheit Nord, un grande hospital público en Bremen. Todavía tiene que esperar unas semanas más para que reciba el reconocimiento de su título, pero hasta entonces tendrá la oportunidad de mejorar su alemán y establecerse en el hospital. Estamos orgullosos de Gilia y de cómo, con coraje e independencia, ha encontrado su camino hasta aquí.

Holalemania: Gilia, ¿qué te llevó a reservar un vuelo a Alemania en un momento en que la vida pública allí todavía estaba “atascada”?

Gilia: Principalmente el deseo de salir y comenzar esta nueva aventura. Me sentía preparada y me había estado preparando para este paso durante meses. Definitivamente ayudó que aquí, en Alemania, la situación no era tan complicada y el número de casos de Coronavirus era menor.

Holalemania: ¿Qué piensas de este paso hoy? ¿Fue la decisión correcta?

Gilia: Ciertamente, y si hubiera tenido la oportunidad lo habría hecho de inmediato. No habría retrasado el inicio del contrato por más de un mes. Aquí en Alemania ya había encontrado la casa y el hospital me estaba esperando, así que tan pronto como tuve la posibilidad de salir tomé la oportunidad.

Holalemania: ¿Con qué sentimientos abordaste el avión en Milán?

Gilia: Había muchos sentimientos. Por un lado, estaba feliz, llena de energía y optimista porque finalmente me iba. Por otro lado, me sentí un poco asustada. Creo que siempre hay un poco de ansiedad y miedo cuando se da un paso tan grande y a eso se le añadió la preocupación dada por el Coronavirus.

Holalemania: ¿Cómo es tu vida en Alemania? ¿Tu trabajo y tu vida personal?

Gilia: Mi vida aquí está empezando y la estoy construyendo paso a paso. Cada día tengo la oportunidad de aprender cosas nuevas en el trabajo y mejorar el idioma. En el trabajo he encontrado colegas serviciales y amistosos. Cuando tengo tiempo libre voy a descubrir la ciudad, Bremen es una ciudad maravillosa, muy diferente de Milán (mi ciudad natal) y ofrece muchas posibilidades. No puedo esperar a que vengan las otras chicas italianas que trabajarán aquí conmigo y de conocer gente nueva.

Holalemanía: ¿Qué es diferente en la vida cotidiana aquí, en comparación con Italia, en esta crisis, aparte de los acontecimientos menos difíciles hasta ahora?

Gilia: Viniendo de Milán, donde la situación no era fácil, donde había muchos casos y mucha preocupación, me llevó un tiempo acostumbrarme a la normalidad aquí de nuevo. La posibilidad de salir, de hacer deporte al aire libre era algo que no podía hacer en Milán. Seguramente aquí la vida fluye más pacíficamente. Obviamente hay restricciones, pero la situación es más simple.

Holalemanía: ¿Recomendarías este paso a otros colegas?

Gilia: Claro, sin ninguna duda. Es una gran oportunidad para el enriquecimiento personal tanto en el lugar de trabajo como en la esfera personal. Estoy feliz y satisfecha.